lunes, 19 de julio de 2010

CAPITULO 4: El nacimiento del "Unión" de La Calera

4.1.- La fundación del club "Unión"

Pese al resultado de la votación que aprobó la fusión de "Deportes La Calera" con los equipos de Cemento Melón, costó llegar a hacer realidad la iniciativa. Los opositores a la unidad deportiva provocaron más de un conflicto. Incluso, Nicolás Chahuán no fue considerado en las deliberaciones. Debieron hacerse varias reuniones hasta llegar a un acuerdo, que los caleranos esperaban en las calles.

La fecha oficial de la creación del Club Deportivo "Unión" de La Calera fue el 15 de abril de 1955. Luis Orlando Anabalón recuerda que "la sesión fundadora fue sólo de protocolo. Ya se sabía que había un acuerdo y hasta el nombre del nuevo club. Entonces, para la ocasión, habían traído hasta una banda para celebrar el acontecimiento. Hubo fiesta en las calles del centro".

La nueva institución deportiva se llamó "Unión", en honor de la unidad que se había conseguido entre todos los clubes caleranos. Se pactó que el directorio lo compondrían 16 miembros. Ocho de ellos serían representantes de los clubes de la ciudad y los restantes corresponderían a las entidades deportivas de Cemento Melón.

4.2.- Los colores y el escudo

El primer directorio del Club Deportivo "Unión" de La Calera fue presidida por el alcalde Ramón Aravena Laborde; el ingeniero Rodolfo Mateluna, vicepresidente; Sergio Olave Castillo, tesorero; Luis Herrera, protesorero; Julio Rolando Escobar, secretario; y Heraldo Cabezas, prosecretario. Los directores fueron Alberto Caso, Manuel García, Hernán Latorre, Manuel Rubilar, Juan Silva, Froilán Vergara y Serapio Zelaya.

También se definió que los colores que usaría el club "Unión" serían el rojo en las camisetas, el blanco para los pantaloncillos y el plomo en las medias. Asimismo, se determinó cambiar el escudo del club, que hasta el momento era el de la ciudad. Se encargó a Adriana González -hija de un dirigente y hermana de dos jugadores- para que diseñara el nuevo emblema.

Este debía tener por motivos la flamante unidad conseguida por los futbolistas caleranos y los colores de las instituciones formadoras del nuevo club. La insignia llevaría una "U" blanca (los colores de Cemento Melón), sobre un fondo azul (colores de las tricotas de "Cóndor" y "Tifón") y verde (de "Minas Navío"), y el nombre de la ciudad en blanco, sobre una base roja (de Calera Comercio").

4.3.- El primer año de "Unión" en el fútbol profesional

La fusión de todos los clubes caleranos permitió concentrar un mayor respaldo institucional. El aporte de los dos mil trabajadores de Cemento Melón, a quienes se les descontaba sus cuotas de socios por planilla, le dieron el respaldo económico al club. El primer equipo de "Unión", para el Campeonato de Ascenso se hizo a través de una selección de jugadores de los diversos clubes. También se trajo a algunos jugadores experimentados como Rogelio "Care Gallo" Lazcano (ex campeón con Everton) y el zaguero argentino Fabián Cabrera

El arquero Luis "Tato" Pérez Arancibia recuerda que "para armar el primer equipo, de 1955, se llamó a una prueba de jugadores. Yo jugaba por Cemento Melón y trabajaba en la Maestranza. Cada club envió a sus mejores jugadores. Cuando llegamos a probarnos había como doce arqueros. Quedamos Delicio López (que había jugado en Magallanes), José Aguilera y yo".

El director técnico era un napolitano de apellido Pretto. Un viejo artículo en el Diario "La Unión" de Valparaíso, recrea la génesis del primer equipo de "Unión" de La Calera. "Quiméricamente se pensó de salir airosos con el plantel de jugadores que empezó a adiestrar el entrenador Pretto. Más de cuarenta elementos tenía a su disposición este entrenador italiano.

"Después de las primeras presentaciones del cuadro -agrega `La Unión´- la directiva que presidía Ramón Aravena Laborde, llegó a la conclusión que, con sólo los elementos a mano, no se llegaba a ninguna parte. Se buscaron los refuerzos y con la escasez económica evidente se contrataron nuevos elementos. Se afirmó la cosa, hasta lograr un honroso vicecampeonato".

El torneo de 1955 tuvo como competidores, en tres ruedas, a los cuadros de "Unión" de La Calera; San Luis de Quillota; Iberia de Santiago; Alianza de Curicó; Transandino de Los Andes; Universidad Técnica de Santiago; Maestranza Central de San Bernardo; y Santiago National, también de la capital.

Sonia Aravena, que ostenta ser la socia Nº 9 del club, recuerda que "cuando partió Unión La Calera, jugó un tiempo en el Estadio de Cemento Melón. Mientras, se hacía la cancha y dos tribunas de maderas con cuatro peldaños. Era bien peligroso ir a ver los partidos, porque era fácil perder el equilibrio. Los camarines eran unas casuchas y, a veces, los jugadores no tenían ni agua para bañarse".

4.4.- La historia del tren que llegó tarde al partido

Sin embargo, el vicecampeonato de "Unión", en 1955, no estuvo exento de una polémica que aún es histórica. El arquero Luis "Tato" Pérez recuerda que "era el último partido del torneo. San Luis era el puntero y nos llevaba dos puntos de diferencia (además los superaba ampliamente en diferencia de goles). Nosotros teníamos que jugar con Universidad Técnica y los quillotanos con Trasandino en Los Andes".

Sonia Aravena conoció de cerca la infrahistoria de la final del campeonato de 1955. "Como en San Luis estaban tan seguros de conseguir el punto que necesitaban, sus dirigentes anunciaron que sus jugadores viajarían, junto a su hinchada, en un tren a Los Andes.

"Mi hermano (Ramón Aravena Laborde) lo supo y fue a hablar con los maquinistas de los trenes. Supo quién iba a conducir el tren del domingo y `arregló´ una pana por el camino. No es muy justificable, pero él quería que el equipo de la ciudad fuera campeón".

La petición al maquinista por parte del alcalde Ramón Aravena Laborde se cumplió. El tren estuvo detenido por unos quince minutos en las cercanías de Los Andes. Los jugadores quillotanos comenzaron a vestirse arriba del vagón que ocupaban. Llegaron listos a la cancha de Trasandino. Tuvieron problemas para ingresar al estadio andino, porque el árbitro (un ecuatoriano) aplicó el reglamento amateur y dio por ganador al equipo de Los Andes.

Sonia Aravena dice que su hermano estaba en conocimiento que el tren se había detenido. "Los ferroviarios de la estación lo mantenían al tanto y la noticia que San Luis había llegado atrasado corrió por nuestro estadio. Entonces, había que ganar a Universidad Técnica, que era un equipo del montón. Yo estaba de espectadora y al principio, ganábamos fácil por dos goles a cero".


4.5.- Cuando el San Luis campeón pasó por La Calera

Sin embargo, Ramón Aravena Laborde le dijo a su hermana que "había visto a unos dirigentes de San Luis que entraron al camarín de Universidad Técnica. Entonces, llamó a Nicolás Chahuán y le dijo que hablara con el arquero de ellos y le ofreciera algún dinero. Nicolás le respondió: `para qué vamos a gastar más plata si vamos ganando´. Se pusieron a discutir. Desde entonces, no se llevaron bien".

En el segundo tiempo, varió todo el juego y Universidad Técnica empató el partido a dos goles (Según Luis "Tato" Pérez, con dos autogoles del argentino Cabrera). "Después del entretiempo -apunta Sonia Aravena- los jugadores adversarios parecían leones. Además el arquero contrario (Remenich) atajó todo lo que le llegaba.

"Mi hermano se agarraba la cabeza a dos manos. No se pudo ganar y tuvimos que asumir que San Luis iba a ser el campeón, aunque había que esperar qué diría la Asociación Central sobre el atraso de San Luis". Sin embargo, había precedentes en el fútbol profesional. Everton había esperado 40 minutos a Green Cross para jugar un partido.

Cuando regresó el tren de San Luis varios caleranos, indignados, se habían apostado junto a las vías férreas. No se veía a nadie tras los ventanales del convoy, pero se escuchaba el himno de los "canarios", que cantaban los hinchas quillotanos escondidos debajo de los asientos. Una multitud de piedras recibió a su paso por La Calera a los flamantes campeones quillotanos de 1955.

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